Estas sesiones, tanto las individuales como las grupales, están dirigidas a personas que estén en un proceso de búsqueda interna o que quieran complementar un trabajo terapéutico que ya estén realizando, con un tipo abordaje diferente que tenga en cuenta los niveles energéticos de la conciencia.
Idealmente algunos requisitos necesarios para hacer una primera sesión serían los siguientes:
- Haber realizado un proceso terapéutico a nivel psicológico que haya establecido y ordenado las bases psíquicas personales.
- Tener procesada y trascendida la historia familiar.
- Haber buscado información acerca del cuerpo, la mente o la conciencia, que va más allá de lo estrictamente científico o convencional.
- Haberse hecho preguntas existenciales que pongan en cuestión las circunstancias externas y también las personales.
- Tener una mentalidad abierta.
- Tener voluntad de cambio.
- No rechazar aspectos de la realidad como conciencia, energía, dimensiones astrales, entidades o reencarnación.
- Haber practicado algún tipo de camino espiritual o de desarrollo personal, pero a la vez que exista la capacidad de cuestionarlos.
- No haber practicado ningún tipo de camino espiritual, pero sí haberse cuestionado algún aspecto de su vida, haber sufrido alguna crisis o querer hacer cambios, aprender o avanzar.
- Tener como propósitos no sólo el alcanzar objetivos personales, sino el tener una conciencia cada vez más lúcida, madura y con más capacidades energéticas o de percepción.
Sin embargo, como esas condiciones internas ideales son difíciles de cumplir, nunca es tarde para iniciar un proceso de autoconocimiento, aunque en caso de empezar de 0, hay que tener claro que se va requerir de un compromiso por parte de la persona y que, para entrar en niveles profundos de uno mismo, se necesita tiempo y práctica (que será mayor o menor dependiendo del grado propio de resistencia al cambio).