¿Qué es una sesión energética?

Una sesión energética es un abordaje de asistencia a la conciencia, que se realiza con el objetivo último de conectar y activar los niveles sutiles energéticos del cuerpo.

Esta clara conexión con uno mismo, se puede lograr si limpiamos todas las interferencias energéticas debilitantes que están almacenadas entre las múltiples capas en nuestro cuerpo, tanto a nivel de los canales sutiles internos, como del campo energético exterior.

En estas sesiones, se trabaja con la energía de la persona para movilizarla, desbloquearla, aumentar la autodefensa y activar la propia vitalidad o, lo que es lo mismo, la potencia. Por este motivo, a esta terapia también podríamos denominarla terapia energética vibracional.

¿Para qué sirven las sesiones?

Principalmente para aumentar la energía de la que se dispone en la vida cotidiana.

Aprender a diferenciar la mente de la conciencia es otro de los objetivos de estas sesiones, puesto que desde la mente racional, no es posible acceder a la percepción de los canales sutiles y de los puntos energéticos del cuerpo.

Sólo la conciencia, que va más allá de la concepción ordinaria del tiempo y del espacio, puede descubrir el movimiento de la energía sutil y así empezar a salir de la mente humana programada, que es, en gran medida, la que mantiene a la persona en un estado bajo de energía.

La eliminación de las informaciones energéticas erróneas, la alineación de todos los niveles del cuerpo energético, la clara conexión con la conciencia y mucha práctica, es lo que puede ayudar a la persona a borrar todo aquello que le impide vivir de forma significativa y conectada al más profundo propósito existencial humano, que es el despertar de la visión energética de la realidad.

¿Cómo aprender a reconocer la energía del cuerpo?

Las energías del cuerpo las podemos aprender a reconocer a través del aumento de las capacidades perceptivas energéticas. Estas capacidades se van adquiriendo gracias a la limpieza y mejora de la calidad de las energías internas.

A más refinado está el cuerpo energético sutil, mejor se podrán captar tanto las dinámicas internas, como todo lo que se mueve a nivel del entorno que nos rodea.

El otro aspecto fundamental para aprender a aumentar la energía vital, es la apertura de la conciencia, para así integrar mejor las distintas frecuencias que están presentes en la naturaleza. Si se saben asimilar las energías saludables del entorno, será mas fácil integrarlas para que circulen de forma armónica en el propio cuerpo.

BENEFICIOS DE UNA SESIÓN ENERGÉTICA INTEGRAL

El beneficio principal de estas sesiones, es el desbloqueo del cuerpo energético y la recuperación de la energí­a vital para así aumentar el bienestar de una forma integral.

La persona, por lo tanto, va tomando conciencia de aquella información que está oculta en su cuerpo energético, que muchas veces es la causa de estados crónicos de fatiga y debilidad.

Eliminando la información que interfiere en la óptima circulación energética del sistema, se puede experimentar un gran bienestar, unido a la sensación de tener un completo control sobre los puntos energéticos del cuerpo.

Vivir desde el propio potencial permite salir de la debilidad interior, llegar a ser una persona enérgica y ser consciente la propia energía vital profunda.

Pero la distorsión que puede haber almacenada en los cuerpos físico, mental, emocional y energético, impide que vivamos alineados con nuestra conciencia y que podamos realizar un cambio verdadero a nivel interno y externo.

Estas sesiones no son sólo una terapia de regulación energética o una terapia energética emocional, sino que van más allá, ya que tienen en cuenta aspectos mucho más amplios como el propósito existencial de la persona, su potencial de desarrollo evolutivo y la información energética oculta que daña los cuerpos sutiles.

Otros beneficios de las sesiones son:

  • El aprendizaje de una buena gestión de la propia energía para así evitar la pérdida de la vitalidad.
  • Poder vivir más allá de la programación energética del pasado, que hace que la persona esté anclada en el mismo lugar de siempre y sin poder avanzar.
  • La conexión con la propia conciencia, el descubrimiento de los niveles sutiles energéticos del cuerpo y la investigación acerca de la energía universal y humana.
  • Poder salir de la mente condicionada basada en la dependencia y en la pura repetición de patrones y hábitos de acción.
  • Potenciar la autonomía interna y la creatividad propia.
  • Un incremento de la energía vital y una disminución de la sensación de fatiga y debilidad.
  • Una mayor sensación de autoconfianza y expresión corporal auténtica, puesto que aumenta el brillo, la luminosidad y la belleza del cuerpo energético.
  • Una ampliación de la claridad mental, un mayor equilibrio emocional y la conexión con los niveles más lúcidos y evolucionados de la persona, que permiten un mejor desarrollo del potencial energético.
  • La recuperación del eje vertical de la columna vertebral, con lo que el cuerpo expresa una mayor ligereza, seguridad y autenticidad.
  • Más agilidad y eficiencia del cuerpo fí­sico. Aumenta la sensación de moverse de forma más rápida y sin esfuerzo.
  • Una mejora instantánea del estado de ánimo. Limpiando la información negativa que pueda haber en el cuerpo energético, la persona transforma estados de ánimo basados en la desesperanza y la negatividad, en estados de ánimo positivos y centrados en las oportunidades y no en los obstáculos.
  • Un incremento de la fuerza y la energí­a destinada a la acción en la vida cotidiana.